El deseo - 1998
El deseo. Esa sensación primitiva y primaria que experimentan hombres y mujeres desde el nacimiento y hasta la muerte. Del deseo deriva la satisfacción y la frustración; de él surge el placero la frustración; así como, también nace la envidia. Esta exposición efímera nace con la intención de que la gente satisficiera su deseo por acceder a algo cada vez más inaccesible: el arte. Pero también existe el deseo frustrado. En el cuarto del deseo se presentaron esculturas colgadas en el techo, como una invitación a ser tomadas. Sin embargo, esas piezas de barro no están cocidas y se romperán al tratar de bajarlas.
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