La culpa negada, el deseo, reprimido y la fantasía propia atribuida a los otros… todos esos sentimientos que afloran incontenibles y que nuestra mente trata de domarlos sin mucho éxito la mayor de las veces, ha sido la manera en como la
sociedad ha construido maneras de subjetividad femenina desde la castración. Juegos de la Mente presenta esos deseos ocultos desde los territorios de la ironía y el empoderamiento. No hay redención, no hay culpa, solo identidad recuperada.